¿Alguna vez has tenido la sensación de que para mantener tu negocio funcionando tienes que cachar y lanzar muchas pelotas mientras te mueven el piso?
Lamento decirte que no eres nada original. Estás experimentando algo así como el síndrome del empresario malabarista.
Muévete de la meseta a la pirámide.
Todos cuando empezamos nuestros negocios vemos un comportamiento de las ventas parecido a una meseta. Crecen de manera consistente durante un tiempo y después se aplanan o dicho políticamente se estabilizan. Pero el caso es que esa supuesta estabilidad te tiene atrapado en el síndrome mencionado. Quieres crecer pero cada vez que lo intentas te mueven el piso.
Por eso te tienes que mover de esta meseta a una pirámide como las que hacían nuestros ancestros . Primero creaban una base, la consolidaban y una vez que estaba suficientemente firme, se iban por el siguiente nivel. Y así construyeron las grandes obras que vemos hoy y que perduran a través de los siglos.
En el caso de la empresa no es diferente. Tú iniciaste atacando y conquistando un mercado determinado y cuando llegaste a tu máximo potencial en él, empezaste a experimentar la sensación de aplanamiento y quisiste ir más arriba, pero sin haber consolidado lo que ya tenías. Este camino es peligroso porque vas a tratar de subir mientras el piso se te mueve.
Construye tu marca.
Pero si lo que quieres es un crecimiento sólido, rentable y sostenido, es necesario dejar de ver hacia arriba momentáneamente y consolidar lo que tienes para dejar de hacer malabares… y empezar a construir una marca que pueda estar en todos los mercados, todos los canales de distribución y todas las ciudades en que quieres estar sin tener que ir personalmente porque la marca va a representar todos tus valores y las ventajas de tu producto o servicio.
Y entonces sí, al siguiente nivel, entendiendo que quizá ese siguiente nivel te demande una ampliación de tu portafolio de productos o servicios para atacar a mercados más específicos, o tal vez te pida un crecimiento en tus canales de distribución para tener mayor alcance territorial, o probablemente te rete a entender mejor a tus consumidores para ser más apreciado entre ellos. Todo esto será más sencillo, menos costoso y más rentable si has construido tu marca… y generará más valor financiero para tu negocio a largo plazo!
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